Artesania
En FIQUZ, valoramos la colaboración con artesanas. Al asociarnos con ellas, buscamos preservar técnicas artesanales tradicionales y enriquecer nuestras prendas con historias y significados únicos. La colaboración no solo genera un impacto económico positivo, sino que también fortalece el tejido social de las comunidades, promoviendo la transmisión de saberes y la autonomía de las artesanas.
Nuestra colaboración se basa en un intercambio respetuoso y enriquecedor. Trabajamos mano a mano desde la concepción del diseño hasta la finalización de cada pieza. Las artesanas aportan su conocimiento ancestral en técnicas como el tejido, el bordado y otras artes manuales, mientras que FIQUZ contribuye con conceptos de diseño contemporáneo y acceso a mercados más amplios. Este proceso colaborativo garantiza que cada prenda sea un diseño único.
Las Artesanas
Las artesanas con las que colaboramos son portadoras de técnicas tradicionales transmitidas de generación en generación. Por ejemplo, Chacha, que aprendió de su madre el arte del crochet, bordado y la confección textil. A través de sus creaciones, combina técnicas heredadas con una visión contemporánea del diseño. Su trabajo no solo representa la destreza manual y el detalle artesanal, sino también el valor de preservar y reinventar saberes ancestrales. Al trabajar con Chacha, en FIQUZ reforzamos nuestro compromiso de dar visibilidad a estas prácticas, creando piezas únicas que cuentan historias de dedicación, herencia y arte hecho a mano.
Otro colectivo de mujeres artesanas es Casa Taller Soscua, ubicado en Guatavita, donde imparten conocimientos sobre tejido y oficios artesanales del altiplano, tejiendo una conexión profunda con el territorio. Estas prácticas no solo son una expresión artística, sino también un medio para mantener viva la identidad cultural de la región.
Beneficios mutuos
La alianza entre FIQUZ y las artesanas genera beneficios significativos para ambas partes. Para las artesanas, representa una oportunidad de acceso a nuevos mercados, reconocimiento de su trabajo y una fuente de ingresos. Para FIQUZ, la artesanía y el trabajo hecho a mano no son solo parte de nuestras colecciones, sino uno de los tres pilares fundamentales de la marca. En un mundo dominado por la moda rápida, queremos devolver el valor a los procesos lentos, aquellos que requieren dedicación, paciencia y saberes transmitidos de generación en generación. Creemos que solo a través de esta conexión entre el tiempo y la creación es posible unir la sostenibilidad con la moda.
Así como en el deporte, donde el progreso requiere constancia y esfuerzo, en la artesanía cada puntada, cada tejido y cada bordado reflejan una historia de compromiso y pasión. Por eso, en FIQUZ apostamos por piezas que no solo visten, sino que cuentan historias, celebran la tradición y fomentan un consumo más consciente y responsable.
Otro colectivo de mujeres artesanas es Casa Taller Soscua, ubicado en Guatavita, donde imparten conocimientos sobre tejido y oficios artesanales del altiplano, tejiendo una conexión profunda con el territorio. Estas prácticas no solo son una expresión artística, sino también un medio para mantener viva la identidad cultural de la región.
Para conocer más sobre el trabajo de nuestras artesanas y sus técnicas, te invitamos a visitar sus paginas de instagram: